Demasiadas expulsiones

Un partido y medio en inferioridad
El equipo de Cúper ha visto más rojas que nadie y ha jugado 141 minutos con uno menos

H. MARTÍN. PALMA.

El Real Mallorca se ha convertido en once jornadas de Liga en el equipo que más tarjetas rojas ha visto (5), pese a ser el segundo con menos amarillas. Aunque donde está el verdadero punto negativo es en la cantidad de minutos que el equipo de Héctor Cúper se ha quedado con algún hombre menos. En total, 141, o lo que es lo mismo que un partido y medio bajo mínimos. Media hora de juego más que el Atlético de Madrid, el club que lo precede en la clasificación con 111 minutos. El esfuerzo que ha realizado la plantilla bermellona en las dos últimas jornadas ha sido titánico, pero debe ser el punto de partida para encontrar una solución que el técnico argentino aclaró que está "en el entrenamiento".

Pese a todo, la precocidad de Fernando Navarro y Pereyra a la hora de abandonar el terreno de juego no es comparable a la de Antonio López. El lateral zurdo dejó vendido al Atlético de Madrid en el derbi madrileño contra el Madrid cuando sólo se habían cumplido cinco minutos de juego. El colegiado González Vázquez no perdonó la dura entrada que hizo y que Ronaldo marcaría de penalti. La expulsión y el penalti decidieron un choque que terminó con un rotundo 0-3.

Hasta la fecha, el Mallorca con un hombre menos ha tenido las de ganar y eso que tres de los cuatro partidos fueron en campo adverso. En los dos encuentros en los que el resultado estaba casi sentenciado sólo empeoró en el caso del Santiago Bernabeú frente al Real Madrid. Ante el Barcelona aguantaron el 2-0 también a domicilio. Fueron los dos duelos en los que se evidenció la impotencia del equipo cuando Ballesteros -el jugador más veces expulsado esta temporada junto a Diego Rivas- abofeteó a Puyol en el Camp Nou y a Beckham en el coliseo blanco. Los dos grandes del fútbol español son la cara opuesta del Mallorca. Los de Wanderley Luxemburgo han sido expulsados en cuatro ocasiones, pero sólo en 37 minutos han dejado al equipo con uno menos. Woodgate en su olvidable debut, con gol en propia puerta incluido, fue el causante de la mayoría. El Barça de Rijkaard sigue la senda blanca aunque con este apartado impoluto: cero expulsiones.

Se les da mejor con diez

En cambio, los dos encuentros con la expulsión en la primera mitad han dado resultados poco frecuentes en el mundo del fútbol y que ni el propio Cúper debió imaginarse en un principio. Se empató ante el Sevilla (1-1) y se remontó ante el Cádiz (1-2). Las broncas del argentino en un primer momento derivaron en suspiros de tranquilidad. La actitud de los diez jugadores que aguantaron en el campo ante los dos equipos andaluces sorprendió a los rivales y a la afición que, con el equipo en zona de descenso, no esperaba una reacción similar.

Otro dato curioso son las 43 tarjetas amarillas que ha visto el Racing de Santander esta temporada -23 más que el Mallorca-, pero sólo ha jugado 27 minutos en inferioridad y precisamente por culpa del ex rojillo Melo. El brasileño enloqueció en una acción aislada después de dar una lección de fútbol al Valencia en Mestalla en la jornada nueve. Osasuna es otro equipo que pese a que se le han mostrado 41 cartulinas sus minutos con uno menos son escasos (19). Algo va mal en esta Liga.